Hubo un momento usando el Palma 2 Pro en que pensé: “Ah… esta experiencia es realmente muy buena”. Era un día en que la luz del sol entraba con mucha fuerza en la habitación. Estaba sentado leyendo con el Palma 2 Pro en la mano y pensé: “¿Eh? ¿La pantalla siempre había sido tan nítida?”.

Los e-readers a color como el Palma 2 Pro suelen tener pantallas más oscuras. Sin el frontlight encendido, a veces pueden resultar algo frustrantes. Pero bajo una luz solar fuerte, la pantalla se veía nítida incluso sin frontlight. Fue justo el tipo de “sensación analógica” que esperaba cuando compré un e-reader. Me salió solo el pensamiento: “Qué buena compra”.

Además, otros puntos que considero positivos son:

• Viene con Android 15, así que probablemente tendrá compatibilidad más larga con apps nuevas comparado con Android 13 o 14.
  
• (Comprándolo en el extranjero) La funda incluida tiene MagSafe, así que es muy fácil colocar un soporte y llevarlo cómodamente.
  
• Tengo las manos pequeñas, pero el agarre me resultó cómodo.
• Al principio pensé que la respuesta era lentísima, pero al aumentar la velocidad de refresco en los ajustes se volvió bastante rápido.
  
• Admite tarjeta SIM de datos, así que puede usarse casi como un smartphone.
• He visto gente interesada en él como “sustituto del móvil”. No admite llamadas tradicionales ni SMS, pero con apps de mensajería se puede usar igual que un móvil. Probé una videollamada de FaceTalk en KakaoTalk: no tiene cámara frontal, así que se activa la trasera, pero micrófono y altavoz funcionan perfecto.

Pero en interiores, donde es necesario encender el frontlight, el mismo dispositivo empezó a sentirse algo extraño. Me vino a la cabeza: “¿Esto realmente es más cómodo para los ojos?”.

Una duda fundamental: ¿De verdad los e-readers son más cómodos para los ojos?

Había tres elementos que me hacían sentir que “estoy gastando energía visual innecesaria”.

1. Persistencia de imagen
   
2. Textura de los granos
   
3. Representación del color
   

Persistencia de imagen

Primero, veamos este ejemplo de persistencia. (Incluso con refresco rápido, aparece bastante.)

¿Por qué ocurre esto? La pantalla de tinta electrónica está compuesta por innumerables microcápsulas. Dentro de ellas hay partículas blancas y negras suspendidas en un líquido viscoso. Al aplicar voltaje, según su carga eléctrica, unas suben y otras bajan. Si las negras suben, vemos negro; si se mezclan, vemos gris. Primero se forma la escala de grises, y la luz reflejada pasa por el filtro de color, que absorbe parte de ella, creando el color final.

Pero la tensión no se distribuye perfectamente dentro de cada cápsula, la viscosidad del líquido y la fricción con las paredes afectan el movimiento, así que las partículas a veces no se desplazan por completo y queda parte del estado anterior. Es un problema técnico inherente: la tinta electrónica difícilmente puede eliminar por completo la persistencia. Pensé que no me molestaría, pero en la práctica me chocaba a la vista constantemente.

Textura de los granos

El segundo punto es que la granulosidad es muy notable. En pantallas de smartphone, los píxeles están extremadamente juntos; en cambio, en un e-reader la distancia entre microcápsulas es bastante mayor. Y en los modelos a color, cuatro subpíxeles pasan por filtros distintos para formar un solo punto de color, lo que reduce aún más la resolución efectiva y hace más visible la textura.

▲ La textura se nota claramente, ¿verdad?

No es en todas las zonas, pero ciertos colores la resaltan mucho más.

Color

El último punto es el color. Como expliqué antes, el panel es blanco y negro y encima está el filtro de color. Usar luz reflejada significa que la luz entra pasando por el filtro y sale pasando por él otra vez: un total de dos pasadas. Además, el “blanco” del microcápsula no es un blanco puro. Sumando esto a la baja luminosidad de la luz reflejada, la doble absorción del filtro y el espacio entre píxeles, la distorsión cromática ocurre fácilmente.

Soy de esas personas a las que no les gusta quedarse con la duda, pero todavía no entiendo por qué el resultado se ve “tan grisáceo”. Si alguien lo sabe, por favor mándenme telepatía…

Quizá el blanco y negro sería mejor

Creo que la fatiga visual depende sobre todo de tres factores:

• Qué tan secos están los ojos
  
• Qué tan intensa es la luz que entra
  
• Cuánta tensión tienen los músculos oculares (como el ciliar)
  

Se dice que los e-readers son “más suaves para los ojos” porque no usan luz directa como OLED o LCD, sino luz reflejada del sol o de una lámpara, lo que reduce mucho la energía luminosa que llega a los ojos.

Pero si uno mantiene los ojos abiertos mucho rato, tiene mala postura, o la pantalla está un poco borrosa y necesita reenfocar constantemente, el cansancio aparecerá igual aunque la luz sea poca.

Personalmente, cuando apago el frontlight, la textura de la pantalla se siente mucho más suave y cómoda. Pero es demasiado oscura para usar así a diario. No he usado un lector monocromático todavía, pero creo que muchas de estas molestias se reducirían. Así que honestamente… aunque me encanta el Palma 2 Pro,

“Creo que al final soy del equipo blanco y negro”.

Con el frontlight encendido, la pantalla se siente un poco antinatural.